Marzo de 2378, un sanguinario atentado en la zona federal de la Luna sacude los cimientos de la tensa paz que existe en el Sistema Solar. El Presidente en persona encarga a Wang Lee —el antiguo jefe de la inteligencia colona— que averigüe quién está detrás de la masacre: Marcianos, terrícolas y los piratas del anárquico Cinturón de Asteroides, todos odian a la todopoderosa Federación. Del resultado de su investigación dependerá la próxima guerra espacial.

Por otro lado, en Ceres, un misterioso personaje al que todos llaman El Duque se hace con el control del planetoide y amenaza el poder que ostentan los Señores de la Guerra dentro de los asteroides. ¿Será un aliado o un enemigo más?

 

 

Esta es una novela auto conclusiva, a pesar de ser la segunda de la serie: «Las Crónicas de la Expansión», no es necesario haber leído la primera —«Las Colonias del Sistema Solar. Theia»— para disfrutar plenamente de ella. No obstante, es una historia más complicada y oscura, en la cual no existen ni buenos ni malos. Será el lector quien tenga que juzgar a los personajes y decantarse por uno de los bandos.